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La pintura antigravilla está diseñada para proteger la carrocería de los vehículos contra impactos de piedras, grava y otros escombros que pueden dañar la pintura y causar corrosión.
Además de proteger contra impactos, la pintura antigravilla también ofrece una capa protectora contra la corrosión, especialmente en zonas propensas a la humedad y la exposición a sales.
Se aplica comúnmente en pasos de rueda, bajos de vehículos, faldones, y otras áreas expuestas a golpes y salpicaduras.
Existen diferentes tipos de pintura antigravilla, incluyendo las que son a base de agua, las que son a base de solventes, y las que son catalizadas, cada una con diferentes propiedades y aplicaciones.
La pintura antiderrapante crea una superficie texturizada que mejora la tracción, reduciendo el riesgo de resbalones y caídas.
Se utiliza en pisos de embarcaciones, plataformas marinas, escaleras, rampas y otras áreas donde se requiere un agarre adicional, especialmente en presencia de agua o humedad.
Combina la protección contra impactos de piedras y gravilla con una superficie antideslizante. Es comúnmente utilizada en la industria automotriz para proteger los bajos de los vehículos y en aplicaciones donde se requiere resistencia al deslizamiento, como pisos de embarcaciones o plataformas marinas.
Ideal para cubrir:
COLORES:
